Los planes que Pedro Armas tenía para ayudar a las pymes y autónomos con la re-contratación de sus empleados se ha visto truncado. El Ayuntamiento de Pájara, que prometía ayudar a las empresas con 1.000 euros mensuales procedentes del remanente de 52 millones de euros de las arcas públicas, ha visto frustrado su sueño. El motivo no ha sido otro que la decisión del gobierno de incautar los fondos municipales. El Decreto ley del Gobierno aprobado el 4 de agosto solicita la prestación de 14.000 millones de euros del remanente de los ayuntamientos para fines nacionales. A pesar de que los alcaldes se han rebelado, se cree que sus protestas no detendrán la decisión de Sánchez.