Aunque Pablo Iglesias mantiene el silencio, el secretario del partido Rafa Mayoral ha dicho que el grupo sufre «una persecución política, judicial y mediática». Afirmando que todo vale contra ellos, detalló que todo responde a «un interés político de fondo más que evidente, con el objetivo de acabar con el Ejecutivo de coalición». El grupo morado pidió la anulación de la causa por falta de pruebas más allá de las acusaciones de Calvente.